Este tres de octubre conmemoramos TREINTA Y DOS AÑOS de la desaparición física del maestro Rafael Cortijo Verdejo, quien fallece víctima de un cáncer de páncreas, después de haberse sometido a una delicada cirugía dos meses atrás, descanso en paz en el centro Residencial Luis Lloréns Torres, en Santurce, donde residía con su hermana Rosa.
Orgulloso de su origen humilde, hacia parte de una familia formada por CINCO hermanos: Francisco, Rafael, Cecilia, Rosa y Gilberto hijo de Don Juan Cortijo Clemente y Doña Juana Verdejo. Llega al mundo el 11 de diciembre de 1928 en la Calle Colón de la Parada 21 en Santurce, Puerto Rico. Dedicado a compartir el oficio de la albañilería con la música a través de la influencia de don Paulino Flores, quien lo direcciono en el campo de la percusión cuando solo contaba con once años de edad, dedicando buena parte de su infancia a integrar algunos conjuntos como el de los hermanos Soustache con solo 14 años de edad permaneciendo en el por espacio de un año, pasa al conjunto Monterrey dirigido por Monchito Muley y el del popular “Mentoquin” ó don Juan Palm con ellos hace pasantías hasta cumplir sus 18 años de edad.
Los años subsiguientes a partir de 1947, los alterna con diferentes grupos entre otros con Frank Madera, Armando Castro, Augusto Cohén y Miguelito Miranda y con la Sonora Boricua y para 1953 integra el conjunto dirigido por el pianista Mario Román, presentándose en Night Club, La Riviera en San Juan.
Al decidir Román viajar a los Estados Unidos, dejando el conjunto y el contrato en la Riviera en cabeza de Cortijo, este último le reemplaza con el pianista Néstor Torres, luego reemplazado por Héctor Urdaneta, que aun era estudiante, quedándose apenas por unos meses, siendo reemplazado finalmente por Rafael Ithier Natal, en la parte vocal invito a Sammy Ayala como cantante del grupo en reemplazo del cantante del combo que era Miguel Clemente, quien había decidido irse con el pianista Mario Román.
De esta forma el Combo original ya de Cortijo quedaría conformado por: Miguel Cruz, bajo; Néstor Torres, piano; Papitín, congas; Cortijo en el, timbal; Roy Rosario cantando números alegres como guarachas; “Venezuela” o “Carapipi”, trompeta (este había estado con Arsenio Rodríguez) y Eddie Pérez, saxofón. Al abandonar el grupo, Papitín es reemplazado por Martin Quiñones, quien era un músico veterano y quien fabricaba tumbadoras; como cantante Sammy Ayala.
Se da la invitación por parte de Cortijo a su amigo que por aquel momento (1955), era miembro vocal de la Orquesta Panamericana que dirigía el saxofonista Ángel Lito Peña, nos referimos a Ismael Rivera, quien se convierte en el estelar cantante del combo; pasando Ray Rosario como corista, con esta nomina, reforzada con la llegada del trompeta Miguelito Miranda en reemplazo de Venezuela ó Carapipi; se efectúa la primera grabación, luego ingresa Rogelio “Kito” Vélez, quien se convierte en el estelar arreglista del combo.
Una anécdota poco conocida es la del retiro temporal del combo del recientemente fallecido Eddie “La bala” Pérez, quien tiene un breve paso por el conjunto de “Charlie Miró y sus Pájaros Locos” que tocaba en el “Esquife”; este temporal retiro tiene lugar como producto de un altercado entre “La bala” e Ismael Rivera; en este corto lapso, fue reemplazado por Héctor Santos. Hay quienes sostienen que el famoso falsetto de Eddie fue motivado por el gusto y admiración que sentía por la cantante cubana Graciela Pérez hermana media de Machito.
A las voces de Ismael, Roy, Sammy, los simpáticos coros de Eddie y la llegada de Roberto Roena sumado a su picaresca forma de engalanar el grupo con sus coreografías enseñadas por Aníbal su tío materno, dan la extensión necesaria para convertir a este combo direccionado por Cortijo en el más exitoso y recordado de todos los tiempos de la Isla del encanto.
El éxito y reconocimiento alcanzado por el combo en el periodo comprendido entre 1954 y 1962, que tuvo en Bobby Capó el mecenas, al presentarlos al sello Seeco que regentaba Mr. Sidney Siegel, Cortijo realiza con Ismael su primera grabación en Puerto Rico, en los Estudios Ochoa.
Su aporte a la música latina no solamente contempla la difusión de la plena y la bomba, como ritmos salidos de la Isla, sino que incluye una nueva forma de mostrar la música en tarima, sus integrantes se apartan del acartonamiento de las grandes bandas de la época que trabajaban con rigurosidad, sentados y rostro adusto; Cortijo trabaja con todos sus músicos de pie, con gran alegría, incluyendo bailes y coreografías, donde la improvisación musical hace parte del deleite tanto del músico como del bailador, muchas de estas posturas hoy muy normales, son heredadas del Combo de Cortijo. No se hacen esperar las actuaciones tanto en Puerto Rico como en otras latitudes de América latina, al punto de convertirse el Combo de Cortijo, en el furor del segundo quinquenio de los cincuenta.
El combo de Rafael Cortijo, graba en este periodo un total de 17 trabajos. Hoy aun están vigentes en el oído del bailador temas como "El bombón de Elena", de don Rafael Cepeda, "El negro bembón", “Maria Teresa”, “Maquinolandera”, “El negro bembón”, “El chivo de la campana”, “El Satélite”, “Tuntuneco”, “Volare”, “Quítate de la vía perico” y “A bailar mi bomba”."Juan José", "Besitos de coco", "Palo que tú me das", "Quítate de la vía Perico", "Oriza", "Maquinolandera", "El yoyo", "María Teresa" y "Yo soy del campo", “Perfume de Rosas”, “Déjalo que suba”...etc. Se convirtió en el Conjunto de planta de la popular "La Taberna India" y en el reconocido “Show del mediodía”; se dice que sus presentaciones en el Palladium Ball Room, hacían temblar el lugar. El combo de Cortijo participa en la película "Calipso", una producción italo-francesa dirigida por Franco Rossi, siendo Harry Belafonte su protagonista.
Para el 1962 se da la nefasta disolución del combo original, cuando al regreso de un viaje por Venezuela y Panamá llegan a Puerto Rico y su cantante y amigo Ismael Rivera es detenido por posesión de drogas prohibidas, siendo confinado a 43 meses de prisión en la cárcel de Kentucky, que Capó convirtiera en una leyenda, en su trabajo “Las Tumbas”.
Cortijo decide suspender cualquier actividad mientras su fiel amigo estuviese detenido, lo que motivo que los muchachos del combo aceptaran una oferta de los Hermanos Alvarez Guedes para grabar un trabajo acompañando al cantante dominicano Joseito Mateo, para esta grabación el grupo asumió un nombre sugerido por Guillermo Álvarez Guedes “El Gran Combo”; dado el éxito obtenido y la insistencia de los productores continuaron en solitario arrancando para el mundo el 26 de mayo de 1962 “El Gran Combo de Puerto rico”.
Cortijo decide suspender cualquier actividad mientras su fiel amigo estuviese detenido, lo que motivo que los muchachos del combo aceptaran una oferta de los Hermanos Alvarez Guedes para grabar un trabajo acompañando al cantante dominicano Joseito Mateo, para esta grabación el grupo asumió un nombre sugerido por Guillermo Álvarez Guedes “El Gran Combo”; dado el éxito obtenido y la insistencia de los productores continuaron en solitario arrancando para el mundo el 26 de mayo de 1962 “El Gran Combo de Puerto rico”.
Para 1967, Corijo recompone su agrupación a la que llamo “Cortijo y su Bonche”, iniciando grabaciones para el sello Tico, pasando luego por Ansonia, invitando en diferentes momentos vocalistas tales como: Fe cortijo, Lysedia Sanjurjo, Roberto Angleró, Luis “Che” Delgado, Vitín Meléndez el panameño Camilo Azuquita y los boricuas Nacho Sanabria y Marvin Santiago, Johnny Vega y nuestro compatriota Nelson Pinedo.
En el estudio Bellone, en Manhattan, en mayo de 1970. Le acompaña vocalmente el Santurcino Rafael “Chivirico” Dávila. Dentro de las múltiples grabaciones se da el encuentro con Francisco Ángel Bastar “Kako”, el paso de Junior Cordova y en algún momento conto con la dirección musical de Charlie Palmieri.
En el estudio Bellone, en Manhattan, en mayo de 1970. Le acompaña vocalmente el Santurcino Rafael “Chivirico” Dávila. Dentro de las múltiples grabaciones se da el encuentro con Francisco Ángel Bastar “Kako”, el paso de Junior Cordova y en algún momento conto con la dirección musical de Charlie Palmieri.
De las recordadas grabaciones se da el famoso encuentro con sus compañeros originales en el trabajo denominado para el 1974 “Juntos otra vez”, que hace parte ya de las piezas selectas de Cortijo.
Sus dos últimas grabaciones las realiza en Puerto Rico, La primera se titula “El sueño del maestro”, producida por Frank Ferrer en 1980, siendo los vocalistas Fe Cortijo, hija adoptiva del maestro e Ismael Rivera Jr. y la ultima para el sello Velvet, “Cortijo bailable”.
Su cortejo fúnebre estuvo lleno del fervor de sus admiradores, el cual se llevo a cabo en el Cementerio de Villa palmeras, en una despedida apoteósica que hoy aun se recuerda. Paz en su alma maestro.
Su cortejo fúnebre estuvo lleno del fervor de sus admiradores, el cual se llevo a cabo en el Cementerio de Villa palmeras, en una despedida apoteósica que hoy aun se recuerda. Paz en su alma maestro.
Carlos Molano Gómez
Bogotá - Colombia
Bogotá - Colombia